El Anillo

Hola!!! Aqui estoy de nuevo. Esta semana no he podido escribir nada,el trabajo absorbe demasiado y la red tampoco ayudaba,cuando quería escribir, plaffff, no hay red, y es que esto de tener una red pirateada es demasiado, la verdad que no sé de que me quejo, jejeje.

Pues,por fin viernes, para mí acabó la semana ayer, yupiiiiiiiiiiii!!! Ya sabeis que yo los viernes no trabajo, no lo digo para poneros los dientes largos,sino para que sepais algo más de mí,jijijiji. Dentro de un ratito iré a recoger a dani al aeropuerto, llega de Finlandia , viaje de trabajo. Este fin de semana será más corto de lo habitual para los dos ya que será sólo sábado y parte de domingo pero intentaremos disfrutar al máximo. Eso es lo bueno que tiene verse tres dias a la semana, intentas aprovechar lo más posible y lo vives todo más intensamente.

Bueno, de la boda no sé que más contaros porque no ha evolucionado nada. Hoy enseñé por primera vez mi anillo de compromiso a mis padres, todavía no lo habían visto, la verdad es que es precioso aunque sinceramente si me hubiera puesto una rosquilla en el dedo aquel día tan especial sería igualmente feliz. No recuerdo si dani os habló algo del anillo en el blog pero de todas formas os lo voy a contar como yo lo viví: aquel 18 de marzo estábamos en Madrid, un viajecito de tantos que intentamos hacer cada año. Nuestro propósito de aquel viaje era ver el musical Mamma Mia y de paso ver la ciudad, que aunque los dos habíamos estado antes, nunca lo habíamos hecho juntos. Ese día fuimos a ver el musical, me encantó, lo pasamos genial allí dentro del teatro. Todo esto con una cajita y un anillo dentro de ella y todo a su vez en el bolsillo de la chaqueta de dani que yo no descubrí. Fuimos a cenar, una cena especial en el restaurante del hotel donde nos alojábamos y cuando llegó el momento del postre dani me hizo hacer cerrar los ojos, ni idea que se proponía, y cuando los abrí había una cajita encima de la mesa y una pregunta sonó en mis oídos, ¿quieres casarte conmigo?, yo pensé:no puede ser, lo estoy soñando? y entonces volví a oir, ¿quieres casarte conmigo? y yo pensé: sí, lo ha dicho, pero ¿no me dijo que él no quería casarse nunca? y entonces, a la tercera fue la vencida,¿quieres casarte conmigo? dije que sí, por supuesto que sí. Y aunque hayamos tardado desde la petición, al final nos casamos, y vaya, sólo quedan 183 días.

Espero no haberos aburrido. Un besazo a todos los que leen nuestro blog. Otro día, más.